jueves, 21 de abril de 2011

Entre Panamá y Montevideo

El miércoles anterior de la madrugada joven estuve visitando el Aerouerto de Carrasco,Canelones, Uruguay, para despedir a dos de mis hijos que viajaban a Panamá.Era la alta noche y la espera larga porque hacen ir en estos tiempos de proclamados terrorismos y de computadoras , más de tres horas para el registro del "chequing", toda una serie de aburridos controles.... que no deberían justificar tan larga citación anes que el avion despegue! En fin...Para no aburrirme comencé a observar con mayor detención el entorno. 
Aquella diligente hormiguita humana en esa foto de arriba que apenas se ve, y a su riesgo, anda antes más como araña que como "fourmi", limpiando el esqueleto arquitectónico del Airport de Carrasco.Se pueden apreciar las vértebras...que si estuviésemos en una catedral gótica de la Edad Media europea, les llamaríamos arbotantes.
El concepto de sostener desde fuera la osamenta constructiva es la misma -pese a casi mil años y muchos más quilometros de distancia- entre Notre Dame de Paris y el tan contemporáneo constructo uruguayo de Carrasco. En ambos lugares la gente concurre para volar, en la catedral parisina hacia el cielo; en el Aeropuerto uruguayo tambien uno asiste para eyectarse si porta el vaucher.
De noche por el fenómeno del la reflexión de la luz ,ubicada alumbrante de potentes lumnarias  al interior de Carrasco, no se puede ver hacia fuera por la caparazón vidriada y la cantidad de vértebras las que miradas en angulación, no en frontalidad, parecen paredes sólidas y no fragmentadas. Uno se asfixia de encierro en las grandiosas salas de culaesquiera de las tres plantas, casi que una super nave de la religiosidad laica, nuevo trinar tecnológico abovedado, con columnas rechazadas y acurrucada hacia atrás en las periferias portantes.¡Qué mega gimnasio de fútbol o de básquetbol que nada cuestiona al ojo libre en el espacio libre!
Eso sí, para acceder al predio hay que llevar un G.P.S. y un mapa, amén or las dudas de una brújula complementaria, pues el laberinto vial enloquece. En casos, si Ud. viene desde una ruta de la derecha debe volcarse al otro lado y viceversa.Los extravíos están a la orden del día.Le consta al extraviado que soy. Pero más errático aún por mis audacias de juzgar desde la ignorancia técnica, arquitecturas vanguardistas, ni siquiera con el respaldo de ser un apto y sagaz conductor de vehículo automotor.
Es tan impresionante Carrasco que experimenté la soledad metafísica de su magnificencia y me parece que se ha tenido un tino esperanzador: que de futuro se colmen sus expectativas de multitudes al compás  del crecimiento del país en el que indudablemente se confía.Yo, también.
Lo cierto es que la prole viajó; y ya en la zona del canal del istmo, mi hija me remitió desde un Shopping, cercano al aeropuerto panameño, esta foto :


Un shopping en Ciudad del Panamá.El dinosaurio todavía no ha sido trocado en petróleo...por eso se ríe el bicho Jurásico de la Era Secundaria...de lo contrario lloraría y no jugaría a hacerle chanzas a la uruguaya Gabriela, consumidora del hidro carburo en su cuota parte de integrante de la civilización de los motores de explosión.







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